Hola.

Escribo muy poco en LCDM, pero esta vez quiero compartir con Uds. una cosa que para mí es extrañísima.

Hace unas pocas horas pude hacerme del nuevo disco de la banda islandesa Sigur rós: "me=F0 su=F0 í eyrum vi=F0 spilum endalaust". (?) Nunca los había escuchado. No sabía con lo que me iba a encontrar. De hecho, vi que en LCDM se encuentran reseñados por Ferran Lizana cuatro de sus discos, que por los comentarios parecen muy buenos.

Hete aquí que no sé cómo serán los anteriores, pero éste, después de no poder dejar de escucharlo por un par de horas sólo puedo calificarlo como E X T R A O

R D I N A R I O.

Y sí... es que realmente sale de lo ordinario. No sé muy bien cómo definirlo: ?Es progresivo y sinfónico? Creo que sí. Es orquestado, coral, con voces angelicales, cantado en no sé qué idioma y con intensos climas creados por los teclados, por la orquesta y por el extraordinario cantante.

En fin, algo realmente muy raro y que a esta altura de mis cuatro décadas y pico me ha sacudido como hace mucho no lo ha hecho ningún disco.

No sé si estaré exagerando desde mi ignorancia, pero sólo les puedo decir que es tremendamente hermoso y adictivo.

Espero que algún cajero amplíe este humilde comentario y se despache con una reseña que pueda poner un poco más de luz a un trabajo y a un grupo que francamente me han dejado boquiabierto.

Un saludo desde la devaluada y decadente Argentina.

Discográfica: EMI

Temas:

1. Gobbledigook (3:05)
2. Inní Mér Syngur Vitle ysingur (4:05)
3. Góðan Daginn (5:15)
4. Við Spilum Endalaust (3:33)
5. Festival (9:24)
6. Suð í' (4:56)
7. Ára Bátur (8:57)
8. Illgresi (4:13)
9. Fljótavík (3:49)
10. Straumnes (2:01)
11. All Alright Eyrum (6:21)

Músicos:

• Jónsi Birgission / vocals, guitar, keyboards
• Kjartan Sveinsson / keyboards, electric piano, guitar
• Georg Hólm / bass
• Orri Páll Dýrason / drums

Tras escuchar el single de avance “Gobbledigook”, no son pocos los que pronosticaban un giro hacia el pop de los islandeses. Finalmente, con el nuevo álbum en nuestras manos, los temores pasan a mejor vida ante lo que resulta otro ejercicio comandado por su carácter sonoro personal e instransferible, alejado cada vez más de la escena post-rock que los vio nacer.

Pero que nadie se espere un trabajo aferrado en el inmovilismo, no, el espíritu perfeccionista y de búsqueda de nuevos caminos de la banda, exige ese punto de evolución necesario en cada una de sus obras. Para empezar, el grupo graba por primera vez fuera de su Islandia natal (concretamente en Nueva York, Londres, La Habana y también en la propia Reykjavik) y les acompaña Flood en la producción.

La música habitualmente evocadora de gélidos paisajes nórdicos, se quiere transformarse ahora en luminosidad y preciosismo. Las incursiones en el pop, ya mostradas en su antecesor “Takk”, ganan enteros efectivamente en el mencionado single, así como en “Inní Mér Syngur Vitle ysingur” y la casi festiva “Við Spilum Endalaust”, excelentes ambos. Pero por encima de todo Sigur Rós siguen explorando en los sonidos barrocos, la melancolía y la belleza más pura y cristalina gracias a perlas de épica milimétrica como “Festival” o “Ára Bátur” (donde participan 90 personas entre orquesta sinfónica y coro) impresionantes, al sabor dulce y cálido de “Sud I” o a los delicadísimos cuatro temas que cierran el álbum de forma pacífica e inmejorable, en el último de los cuales, “All Alright”, cantan en inglés por primera vez.

En consecuencia, “Med sud i eyrum vid spilum endalaust” (algo así como “tocamos con un zumbido permanente en los oidos”), supera sin problemas a “Takk” y se erige como uno de los mejores trabajos de los islandeses y a su vez uno de los trabajos para la posterioridad en este 2008.

Valoración: 9/10

Ferran Lizana (rockomick@orange.es)

Junio 2008

Si el título es tan impronunciable como el nombre secreto de la belleza, el álbum en sí es tan indescriptible como la sensación de plena felicidad. Sigur Rós ha compuesto, a mi juicio, el mejor trabajo de

una carrera intachable. La evolución de estos islandeses les ha llevado a un paraíso sonoro donde voces, cuerdas, vientos y teclados se conjuran para ofrecer esa música de las esferas que Pitágoras intuía en sus sueños. Sería absurdo describir este trabajo desde otra óptica que no fuera la de las emociones. La primera parte rompe con la oscura tradición de la banda, que se nos presenta ahora en una orgía de optimismo. Son temas que destilan inocencia y plenitud, guitarra acústica y percusiones mediante. Es la música de la infancia, la de una alegre nostalgia, la banda sonora del primer amor, ese calambre visceral de quien ve nacer a su primer hijo.

La segunda parte del trabajo se sumerge en las umbrías druídicas. La voz de Birgisson encarna como ninguna otra a la voz de los elfos, con canciones que parecen evocar las tristes despedidas en los Puertos Grises. Hay suaves acordes catedralicios, e himnos de ensoñadora melancolía que tienen su culminación en esa espectacular Ára Bátur, emocionante y épica, sin duda el mejor tema que Sigur Rós haya compuesto jamás. El disco, en fin, es soberbio. Todo un regalo para mentes abiertas y, quizá, uno de los más memorables monumentos que el post rock haya construido hasta la fecha.

!Saludos cajeros y cajeras!

Santos González Monroy

Aqui va otra opinion sobre el comentario acerca del reciente disco de Sigur Ros. En principio, creo que estos islandeses no hacen rock progresivo aunque si se nota que tienen influencias del genero, basicamente por los crescendos al final

de algunos temas. Yo me animaria a decir que su musica es minimalista, ambiental, eterea y mucho mas emparentada con el post rock o indie rock que con

el RPS.

En esta ocasion nos presentan un producto compuesto por 11 tracks, el ultimo cantado en ingles. Abundan los elementos acusticos, los efectos angelicales, los falsettos y una atmosfera en general suave, envolvente y relajada, a ratos hipnotica, sin complejidades ni grandes variaciones. La musica es linda, emotiva, pero a veces tan sencilla y facil de escuchar que puede tornarse algo tediosa, sobre todo para quienes no estamos tan habituados a este estilo.

Lo mejor, segun mi criterio, es "Festival", la cancion mas larga (+ 9 minutos) y en la que mas se observa la influencia progresiva.

Me parece que una de las muchas diferencias entre los discos de rock sinfonico y los de post rock es que -en los de RPS- no bastan las primeras escuchas para exprimir todo lo que se nos ofrece, mientras en las musicas de la actualidad una audicion inicial ya nos demuestra que no habra sorpresas ni elementos a descubrir en las sucesivas.

Como conclusion, yo diria que es un album agradable, bonito, pero para escuchar

en momentos de tranquilidad y sin demasiadas pretensiones.

Al margen, coincido plena y penosamente con mi compatriota en aquello de pais decadente y devaluado B3B-)

marceplus@hotmail.com