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LA LISTA DE CORREO HISPANO-PARLANTE SOBRE ROCK PROGRESIVO Y SINFÓNICO 
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 QUATERNA REQUIEM: “Velha Gravura” (1990)

Temas

  1. Ramoniana
  2. Aquartha
  3. Velha Gravura
  4. Tempestade
  5. Madrugada
  6. Toccata
  7. Carceres [bonus track]
  8. Elegia [bonus track]

Integrantes

  • Elisa Wiermann: teclados
  • Jones Junior: guitarras, viola
  • Kleber Vogel: violines
  • Claudio Dantas: bateria, percusion
  • Marco Lauria: bajo Colaboradores – Roberto Meyer (flauta y flautin en 1), Adauto Vilarinho (oboe en 1)

El disco debut del grupo brasileño Quaterna Requiem es un muestrario de piezas musicales bellas, bien armadas, y ejecutadas con exquisita fineza. La huella de la vibracion melodica del Camel y el Genesis clasicos, junto a la de la creatividad multicolor de grupos progresivos con abrumadores elementos academicos (p.e., The Enid), se hacen presentes en el estilo de este quinteto, que a su vez aparece alimentado por el fuerte peso academico que la teclista insufla a sus composiciones (que conforman la mayoria del repertorio), ademas de algunos toques tomados del folklore criollo brasileño. A su vez, la influencia de esta banda se hace notar en trabajos posteriores de otras bandas surgidas en el mismo pais (Tempus Fugit, Dogma, Blezqi Zatsaz).

La primera pieza es acustica, llena de serenidad bucolica, remitente a los colores amables del folklore criollo: la intervencion de las flautas es crucial para recrear la belleza tradicional tan conmovedoramente evocadas por las lineas melodicas creadas por el guitarrista, quien siempre maneja un efectivo trabajo de base con sus acordes y rasgueos de guitarra clasica. Es particularmente raro que un tema atipico dentro de la linea musical predominante de Quaterna Requiem haya sido elegido para abrir el disco, pero ciertamente su serena e ingenua belleza garantiza la atencion del oyente. Mas bien es a partir del impresionante ‘Aquartha’ que la onda sinfonica del grupo brota en su mas decisiva pureza. Este notable tema viene sucedido por el tema homonimo y ‘Tempestade’, dos numeros que rebosan de elegancia y finura: en medio de toda la parafernalia sinfonica creada principalmente por los teclados y el violin, la seccion ritmica se las arregla para sazonar su labor fundante con ciertos colores jazzeros, haciendo que las piezas adquieran un dinamismo especial. Esta secuencia de los temas 2-4 conforman en mi humilde opinion lo mas saltante de “Velha Gravura”. Con el extenso nocturno “Madrugada”, el violin y la viola ocupan el rol central para retratar sonicamente la calidez intimista del momento aludido en el titulo: a pesar de su extension (10 minutos y medio), que puede parecer excesiva para una pieza tan lenta, a mi me parece bastante efectiva en su languidez melancolica.

El repertorio oficial concluye con “Toccata”, un numero hermoso que retoma y realza las inquietudes barrocas que ya se habian establecido en los temas 3 y 4: a pesar de no ser tan esplendoro como estos, funciona como un efectivo y coherente motivo de cierre. Mas efectivos me resultan los dos bonus tracks, los cuales lamento que no sean mas extensos, pues las ideas compositivas contenidas en ellos son tan atractivas que hubieran ameritado un desarrollo mas concienzudo y una labor mas ambiciosa de arreglos. Pero bueno, las cosas son como son, y las cosas de “Velha Gravura” estan bien como estan, mas alla de algunos livianos reparos que yo pueda sugerir: al fin y al cabo, retomando lo que señale al inicio de esta reseña, la belleza y refinamiento vertidos en este disco lo convierten en un clasico del progresivo latinoamericano de nuestros dias.

Cesar Mendoza

(Reseña dedicada a mi amigo Giancarlo Gianotti)

Creada en 1997. ©José Manuel Iñesta. Alojada en el Depto. de Lenguajes y Sistemas Informáticos de la Universidad de Alicante, España.

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