Lo unico que puedo pensar despues de haber escuchado este disco que es un verdadero "tour de force" es: "que lindo seria este album si fuera instrumental". Porque instrumentalmente es irreprochable.

Contiene una musica pretensiosa (pero de calidad) con fuerza y buenas intensiones progresivas y psicodelicas. Pero lo que me resulta insoportable de este disco es su principal protagonista: Ariel Minimal (lider de la banda) y mas que nada su voz que me resulta francamente in-so-por-ta-ble (!!). Es un tipo que canta con una emocion que llega hasta el paroxismo, pero sus gritos despues de una hora de musica cansan a cualquiera. No puedo describir la paz que experimente una vez que el disco termino. "Por fin este tipo cerro la boca", pense. Al principio el disco tiene un par de temas "tranquilos" (y casi "lindos"), pero el final es definitivamente caotico y me crispa los nervios. Ahora, si fuera un disco instrumental estaria buenisimo, y eso se nota en las partes en que Minimal se calla. Momentos que son verdaderos oasis en medio de una locura infernal.

Merito de Eduardo Romeo (quizas, el tecladista argentino mejor equipado), las partes de teclado son muy buenas. Por todo esto destaco al instrumental "Ushuaia" y otros temas como "Faltan miles de anios mas" o "Veinte dias sin dormir".

Es comun que se compare a Pez con el pasado mas progresivo de Spinetta (en especial Invisible), comparacion en la que no estoy para nada de acuerdo, y mas despues de haber escuchado este disco. Despues de todo: que tienen que ver la neurotica y rayada actitud esquizoide de Minimal y la dulzura y lirimo de Luis...? Pero como ya saben: "por lo menos asi lo veo yo..."

Forny Kamo (E.A.)