Voy allá con mi opinión que tiene un poco de todo....

Decidido: me he hecho mayor :-( es una pena pero todo llega. En el concierto me sobraron: 24.700 personas, los rayor lasers, los cerdos volando, la pantalla gigante de plasma, los efectos especiales, las explosiones ..... en definitiva todo lo que no tenía que ver con un escenario y unos músicos en lo alto. Por si no lo tenía claro (que sí lo tenía) ya no me gustan este tipo de macro-conciertos.

Esto era genial con veintitantos años, un montón de colegas, se priba, se fuma, te metes en las primeras filas dando codazos y sales extasiado pero ahora donde esté una sala para 300 personas, como mucho, que me dejen de macro-conciertos.

El problema es que somos una especie en extinción, queremos ir a los conciertos a escuchar música y claro, hoy eso está ya anticuado. pero quiero una sala chica, que lo vea bien en cualquier sitio, que aprecie si el bajista lo lleva de cuatro o seis cuerdas, si el bateria es zurdo, etc.

Esto del viernes es otra cosa que ya tiene poco que ver con lo musical y más con el espectáculo y la promoción, el business en estado puro.

Dicho todo esto me gustó bastante en conjunto, bueno el principio, aunque con un sonido excesivamente bajo, un coñazo de cuidado el final de la primera parte con los temas de Waters en solitario y totalmente impresionante la segunda parte con el Dark Side entero y geniales los bises, especialmente Comfortably Numb.

A destacar la chupa de agua que cayó, de la que me libré al estar en una grada cubierta que había a la derecha del escenario, lugar donde por fin mi mujer pudo ver algo, hasta que llegamos ahí (con los temas de Waters) cuando me agachaba a su altura veía... nada. Otra más; gastaté un pastón en entradas para que la mitad del público no vea ni el escenario ?tan complicado es montarlos diez metros más altos?

En fin, que con sus pros y contras me lo pasé bastante bien

Joaquin Otermin