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Segovia:
Hola amigos. Parece que se ha convertido en una costumbre saludable que
los Flower Kings nos hagan una visita cada dos an~os y aproximadamente por
las mismas fechas. En esta ocasion se cumplio la tradicion y el pasado 17
de octubre se acercaron a Segovia dentro de la gira que les hizo recalar
tambien en Madrid y en Barcelona. Debo decir tambien que son uno de mis
grupos favoritos, por lo cual seguramente sea un poco subjetivo en mis
comentarios, pero en lo esencial creo que coincido con lo que otros
asistentes percibieron ese dia.
A eso de las diez de la noche entramos en la Sala La Escuela unas cuarenta
personas nada mas, lo cual al organizador Luis Adiego evidentemente debio
de parecerle un desastre, pero tambien es cierto que los que alli estabamos
sabiamos perefectamente a lo que ibamos y lo que esperabamos. La sala en
cuestion es un disco pub de escasas dimensiones con un escenario minusculo,
pero nada mas entrar podias encontrarte con los musicos ultimando los
preparativos o refrescandose en la barra. Digo que el escenario era
minusculo y deficientemente iluminado y asi se pudo constatar al ir
subiendo uno a uno, empezando por Bodin y apretujarse como podian alli. Una
larga introduccion de teclados que sirvio para que se fuesen ajustando los
instrumentos dio paso, de forma rotunda a "Devil's Playground", el temazo
que cierra el ultimo disco y que sono, en mi opinion, un poco mas lento, y
con poca nitidez que fue solventandose a raiz de las indicaciones de Stolt
y Bodin al tecnico de sonido de la sala, con el cual hubo en todo momento
un buen entendimiento. El bueno de Jonas Reingold estaba detras de todo
junto al bateria, con lo cual su histrionismo paso un tanto desapercibido
al principio y Zoltan el bateria, con un cambio de look importante (ahora
tiene el pelo negro), estaba agazapado con cascos en los oidos tras su
bateria. En una esquina estaba Hasse Froberg y aun mas esquinado la nueva,
e interesante incorporacion, Daniel Gildenow, lider de los Pain of
Salvation (el que en el 2000, teloneando a Arena en Madrid, llevaba el
brazo escayolado), a la guitarra, teclados y percusiones, aportando
ocasionalmente su impresionante voz. La verdad es que se les veia incomodos
pero poco a poco se fueron relajando (no tanto Roine, que dejaba traslucir
su fastidio por la estrechez, aunque el cabreo parece que le provoca tocar
mejor que nunca, por lo que se vio, lo cual celebro) y el nivel de
ejecucion se mostro sublime, a medida que el sonido iba mejorando. Lo bueno
de una sala pequen~a y un mini escenario es que tenias a los musicos al
acance de la mano: de hecho creo que no los he visto tan cerca tocando
nunca. Menion especial, aparte de Stolt, merecen los teclados de Bodin y
sus emulaciones de mellotron, absolutamente escalofriantes.
A continuacion, ya mas entonados interpretaron "There is more to this
world", de Retropolis, que sono mucho mejor y nos hizo recordar la apertura
del concierto del 99. Los teclados y el resto de los instrumentos, de nuevo
a gran altura, aunque el sonido se antojaba a un excesivo volumen que hacia
perder algo de nitidez. Evidentemente, despues de la increible perfeccion
del sonido que nos ofrecieron en el 2002 en la Sala Ritmo y Compas de
Madrid, cualquier deficiencia resaltaba mas, pero en conjunto puedo decir
que fue aceptable.
Sin tregua, comienzan a sonar los acordes de la magistral "The Truth will
set you Free", y ahora si que hubo que descubrirse ante la calidad sonora y
la ejecucion de los musicos. Practicamente rozo la perfeccion, el grado de
conjuncion entre todos ellos, total, el mal rollo por las estrecheces,
superado, y la locura de Jonas y Zoltan, sublime. Total, que al llegar al
final de los 31 minutos, en la culminacion epica del tema, no sabiamos si
estabamos en Segovia o en el septimo cielo. No puedo olvidarlo, todavia
resuenan en mis oidos los ecos de ese magico momento. Y no fui el unico:
convenci a un residente en Segovia de mediana edad que solo conocia los
grupos clasicos del progresivo a acudir esa noche, y sin haber oido antes
nada de ellos, quedo completamente alucinado y se convirtio desde ese
momento en fan acerrimo del grupo.
Tras la tempestad, la calma. Un tramo acustico nos llevo a una nueva
dimension de tranquilidad. Comenzaron con la balada de resonancias
floydianas "Train to nowhere", solamente con guitarras (y con Bodin
acompan~ando el ritmo con una especie de huevo relleno de arena) con una
conjuncion perefecta entre las voces de Stolt y Froberg. Siguieron con una
version acustica de "Stupid Girl", mucho mejor que la original en este
caso, tambien con unas voces sublimes y un sonido perfecto, y terminaron
con un tema de aire country que me parece que era una version del "Ghost of
the red cloud", tema que originalmente tiene un aire reggae pero que
tranformaron totalmente con unas tonalidades parecidas al "Buffalo Man" de
uno de los discos del club de fans.
A continuacion, de nuevo la potencia. Nada menos que "My cosmic lover",
con un intermedio jazz fusion, e incluso con toques latinos (buena parte de
la concurrencia se puso a bailar a ritmo de salsa), que recordaba por su
contundencia al extra track que aparece en la edicion limitada de
Unfold.... Una pasada total, con improvisacion incluida de Jonas y un
sensacional toque de bateria de Zoltan. Ambos son magnificos: por cierto,
os recomiendo el disco de "The Tangent", nuevo supergrupo donde intervienen
estos dos, ademas de Roine, y miembros de Van der Graaf Generator y
Parallel or 90 Degrees; no os espereis un nuevo Transatlantic porque no es
asi: es aun MEJOR.
Y a continuacion el himno "THe Flower King": la mejor version que he
escuchado, sin comparacion con el directo de "Alive on Planet Earth" ni con
la original. Imaginaros las voces de Stolt, Foberg y Gildenow perfectamente
conjuntadas, la potencia de tres guitarras, y los solos de teclados de la
seccion intermedia con una nitidez asombrosa: incomparable. La culminacion
perfecta para un perfecto concierto.
A requerimientos constantes, nos ofrecieron un bis, ahora ya mas bromistas
y entonados (curiosamente, solo bebian colas y refrescos o agua): una
introduccion del ultimo disco de Bodin que culmino con la parte mas
emocionante y epica de "Church of your Heart". Aunque aqui el sonido flojeo
nuevamente, se me puso la carne de gallina con los agudos de Froberg.
Y no hubo mas. Se les veia francamente cansados despues de dos horas y
pico de concierto, y con la perspectiva de 10 horas de viaje hasta Oporto.
A la salida, y en el magnifico puesto con toda la discografica oficial y
del club de fans del grupo y de los miembros en solitario me compre el DVD
(que calidad de imagen y sonido, por cierto) y el citado disco de The
Tangent. Alli estaba Bodin, al que le fuimos a pedir autografos como
quincean~eros y el sen~or Roine Stolt, sentado y desecho, que tambien firmo
amablemente autografos y bromeo. Por cierto, que no se si sera impresion
mia pero le he visto mas mayor y un poco mas grueso: en cualqueir caso se
le veia bastante satisfecho, y pese a su apariencia fria y distante, es un
tipo amable y encantador. Tambien Jonas (con gorro y abrigo de fieltro) y
Zoltan son muy accesibles, y alli estaban de nuevo en la barra departiendo
con los asistentes, sin ser conscientes de lo que habian hecho y de la
felicidad que nos habian proporcionado. Gracias chicos, y hasta dentro de
dos an~os...o mejor, menos.
Saludos
Alberto Pazo
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